Por una vivienda digna

Vecinos presentan apelación contra desalojo.

CIPOLLETTI. Familias del barrio obrero y barrio bicentenario, vecinos y defensores de los derechos humanos, se movilizan en contra del desprestigio de una lucha pacífica y a favor de una vivienda digna.

El clima

La mañana es fresca, algo de viento y un lindo sol que comienza de a poco a calentar la tierra. En el barrio, los padres, en algunos casos abuelos, dan vueltas alrededor del punto de encuentro, jugando, charlando con sus hijos y/o nietos.

Desde temprano un bombo, y ya la gente va juntándose por una necesidad en común: luchar por sus derechos.

Un padre deja su bicicleta a un costado, toma de las manos a su hija y va de un lado a otro. Más allá se ve salir a una madre de su casa, con hija en brazos, se acerca y pregunta por la hora de salida. Un vecino la saluda y le responde —el horario que arreglamos es a las 09.30—. Ella replica —voy a dejar a mi hija y vuelvo—.

La salida fue efectivamente a la hora pactada. Se repartieron volantes entre los presentes y, a lo largo de todo el recorrido, a vecinos de diferentes barrios. Tal volante, reclamaba vivienda digna y respeto por los derechos humanos; los básicos, ni más, ni menos.

Los vecinos y la movilización

El objetivo no es otro que el de poder llegar con su voz a la comunidad cipoleña en general, repartir volantes e informar. Luchar contra la campaña de desprestigio hacia el barrio, y demostrar que la pelea por sus derechos es por vías pacíficas y no violentas como se ha estado difamando. Hechos que claramente pudieron observarse a lo largo de la mañana, al reconocerse, entre los vecinos y presentes, un aire de sencillez y compañerismo.

No obstante, también se aprovechó el momento en que la abogada Ana Calafat haría presente la apelación a la sentencia previa, para acompañar a su defensora en la causa de todos.

La sentencia y el juez

El juez Alejandro Cabral y Vedia dicta en la sentencia que hubo despojo por parte de los vecinos, atemorizando a los propietarios y que, incluso, ejercieron violencia y actuaron con clandestinidad. Afirmación que es imposible de sostener al no existir pruebas en el expediente.

En cuanto a hablar de despojo, en palabras de Ana Calafat —Despojo supone que hubo una posesión por parte del propietario. Lo cual no es cierto, ya que no la usaba para producir, tampoco estaba pensado un loteo, sin cerco perimetral, ni nada que lo identificara: abandonado. Dando así, la posibilidad, como admite el propio art.2454 del código civil, que las personas puedan ocupar el lugar—.

La apelación

La misma solicita que deje sin efecto la decisión de desalojar que toma el juez en base a entender que hubo violencia, clandestinidad y despojo, tres hechos que no existen.